Hasta ahora he trabajado el Upcycling utilizando el desecho textil pos consumidor. Este es el desecho creado por nosotros (consumidores) cuando desechamos prendas de vestir u otros textiles.

Pero existe otro desecho en la industria de la moda que no llega a los ojos de los consumidores. El desecho pre consumidor, es el creado durante el proceso de manufacturación (fibra, hilo, tela) y durante el proceso de confección.

En promedio 15% de tela es desechada durante el proceso de corte.

En el 2015 se produjeron alrededor de 400 BILLONES de metros cuadrado de tela a nivel mundial.

Si unimos estas dos estadísticas (15% sobre el total producido) significaría un desperdicio de 60 BILLONES de metros cuadrado de material textil. Casi nada!!!

A pesar de que he acumulado una cantidad indescriptible de estos desecho me resulta agobiante hacer algo con ellos. Son tan tediosos y complicados de trabajar que fácilmente caen en el olvido, se reproducen como conejos y cuando te das cuenta han invadido todo tu espacio.

El viernes pasado, después de otra semana laboral, llegué a casa con la acostumbrada bolsa de retazos (que mi corazón no me dejó lanzar a la basura) y me doy cuenta que no tengo donde ponerla (esconderla). Cada gaveta, cesta, bolsa, maleta que hay en mi cuarto esta llena de retazos (o ropa esperando a ser transformada). Fue ese viernes que me di cuenta que tengo un problema. Soy una acumuladora compulsiva de desechos textiles!!!

Así fue como me dispuse a organizarlos y empezar a hacer algo con ellos.

Para esta primera pieza decidí hacer una interpretación de un traje de baño de 1945 que tiene rondando mi cabeza desde hace meses. Si me sigues en Instagram seguro vistes en stories el primer prototipo y todos sus errores, este que te muestro aquí es el patron definitivo y listo para usar =).